La Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero R. y la Academia Panameña de la Lengua conmemoraron el Día Internacional de las Escritoras con un evento que ha cobrado vida desde 2016, gracias a la iniciativa de la Biblioteca Nacional de España y la participación de diversas bibliotecas nacionales de Iberoamérica. Este año, la celebración giró en torno al tema “Mirada de mujeres al mundo rural”, un homenaje a las voces femeninas que han capturado la esencia de lo rural en sus obras.

La jornada se desarrolló en dos momentos especiales. La primera parte estuvo a cargo de la Dra. Margarita Vásquez, directora sustituta de la Academia Panameña de la Lengua, quien ofreció una valiosa reseña sobre las contribuciones de Zoraida Díaz, la primera mujer panameña en publicar un libro de poemas en los años 1920, y Beatriz Miranda de Cabal, destacada poeta y educadora chiricana, hermana de María Olimpia de Obaldía. Beatriz Miranda, originaria de Dolega, provincia de Chiriquí, dejó un legado duradero tanto en la literatura como en la formación de nuevas generaciones.

Durante el evento, se leyeron obras de importantes autoras panameñas como Zoraida Díaz, Beatriz Miranda de Cabal, Hersilia Ramos de Argote, María Olimpia de Obaldía, Stella Sierra, Griselda López, Moravia Ochoa, Matilde Real, Dora Pérez de Zárate, Martina Andrión, Gladys de la Lastra, Berta María Cabezas, Esther María Osses, Amelia Denis de Icaza y Ana Isabel Illueca. La selección de los textos, a cargo de la Academia Panameña de la Lengua, ofreció al público un recorrido literario que reflejó la profundidad y diversidad de la escritura femenina en Panamá.

Entre los lectores que dieron vida a estas obras se destacaron Roxana Muñoz, Daniel Domínguez, Amalia Aguilar, Aris Mariota, Ana María Pinilla, Karen Bernal, John De León, Briseida Bloise, Maybis de León, Camilo Coronado, Luis Carlos Serrano, Zulema Emanuel y Edda Samudio. Asimismo, la participación de 50 estudiantes de la Academia Bilingüe San Lorenzo, de los cuales cuatro formaron parte de las lecturas, enriqueció aún más la actividad.

Además, se presentó una muestra documental curada por María García Hudson, que resaltó la obra de las autoras homenajeadas. Esta celebración no solo destacó la relevancia histórica de las escritoras panameñas, sino que reafirmó el compromiso de la Biblioteca Nacional de Panamá y la Academia Panameña de la Lengua en la promoción de la literatura escrita por mujeres, reconociendo la belleza de la ruralidad en sus creaciones.

Instituciones como APALEC y #500Historias se unieron a este evento, subrayando la importancia de actividades que visibilizan y celebran los aportes literarios de las mujeres en la historia cultural de Panamá.